Layer Cake de Cava y Mandarina

Hoy es un día especial, pero especial de los de verdad...
Me hace mucha ilusión celebrar con vosotros mi QUINTO CUMPLEBLOG, jamás pensé que mis andaduras reposteras fuesen a durar tanto, y aunque tuve el año pasado un tiempo de descanso por motivos de fuerza mayor, estoy contenta de estar de vuelta.

Durante estos 5 años han sido 174 los post publicados en este blog, la mayoría de ellos recetas, pero también los recetarios del reto Dis-Fruta (el cual pretendo retomar) y también algunas mesas dulces.

La última tarta de cumpleblog que hice fue el "Layer cake de Chocolate Blanco y Coco", pero este año quería algo diferente, algún sabor especial, festivo y una combinación de sabores que no hubiera probado antes... entonces me acorde de estos "Cupcakes de Cava y Fresas"... quería usar cava en mi tarta de cumpleblog... busqué... busqué entre mis libros de recetas, y la encontré... encontré mi tarta del quinto cumpleblog, el "Pastel de Mandarina y Champán" de Aliter Dulcia que yo transformé en un Layer Cake de Cava y Mandarinas.

Receta: Layer Cake de Cava y Mandarina

Receta del libro "Pasteles con historia" de Isabel Pérez, o más conocida como "Aliter Dulcia".

La tarta que veis en las fotos es de 15 cm de diámetro y me salieron 5 capas de bizcocho, aunque yo solo usé 4 para la tarta, así que con las cantidades de la receta podéis hacer una tarta de hasta 20 cm de diámetro.

Ingredientes

--bizcochos--
300 gr de mantequilla sin sal
300 gr de azúcar
6 huevos M
ralladura de 2 mandarinas
200 gr de harina de trigo
100 gr de almendra molida cruda
12 gr de levadura en polvo
zumo de 1 mandarina
1 cdta de vainilla en pasta

--almíbar--
200 ml de cava
60 gr de azúcar
zumo de 3 mandarinas grandes

--crema--
500 gr de queso mascarpone
180 gr de azúcar glass
50 ml de almíbar

Elaboración

1. Precalentamos el horno a 180º.

2. Batimos la mantequilla junto con el azúcar hasta que esté espumosa y doble su tamaño.

3. Añadir los huevos uno a uno.

4. Añadir ahora la pasta de vainilla y la ralladura de naranja.

5. Tamiza la harina de trigo y añade a la masa, también la harina de almendra y la levadura y mezcla a la velocidad más lenta de la batidora.

6. Por último, añade el zumo de mandarina y termina de integrar todo.

7. Vierte la masa en un molde para tartas y hornea durante 40 minutos aproximadamente. Yo usé dos moldes de 15 cm de diámetro.

8. Una vez horneados los bizcochos deja enfriar por completo sobre una rejilla.

Elaboración del almíbar

Pon todos los ingredientes del almíbar en un cazo y calienta hasta que hierva. Dejar hervir un minuto y retira del fuego. Deja enfriar.

Elaboración de la crema

1. Tamiza el azúcar glass sobre el bol de la batidora.

2. Añade el queso mascarpone y bate hasta que obtengas una crema sin grumos.

3. Añade poco a poco el almíbar y bate hasta que esté todo bien integrado.

4. Reserva en la nevera al menos una hora antes de usar para que coja consistencia.

Montaje de la tarta

1. Pon un poco de la crema en una base para tartas y coloca encima la primera capa de bizcocho.

2. Empapa el bizcocho con el almíbar.

3. Pon un par de cucharadas grandes de la crema y esparce hasta dejarla lisa.

4. Coloca encima la segunda capa de bizcocho y vuelve a repetir los pasos 2 y 3 hasta colocar todos los bizcochos.

5. Cubre la tarta con una fina capa de crema y deja en la nevera una media hora.

6. Pasado el tiempo vuelve a cubrir con una segunda capa de crema, esta vez más gruesa.

7. Alisa o decora la tarta a tu gusto. Yo en esta ocasión intenté dejar la cobertura lo más lisa que pude, pero ya os digo que es bastante difícil de dejar una tarta lisa con esta crema, pues al no llevar mantequilla no se queda tan fija a las paredes de la tarta, además de que no tiene tanta consistencia como la crema de queso o mantequilla.

Una vez acabé con la cobertura coloqué unas mandarinas confitadas en la parte delantera que pinté con pintura dorada comestible.

Para terminar puse unos sprinkles de azúcar de color dorado. Estos son de la marca "Decora" y los compré en "Marialunarillos".

Esta me ha encantado, tiene un sabor muy delicado y especial por la combinación del cava, la almendra y las mandarinas, perfecto para ocasiones muy especiales. A pesar de ser un bizcocho hecho con mantequilla que suelen ser densos me sorprendió lo ligero que era, eso si, empado con ese almíbar de dioses mushísimo mejor.

En cuanto a la crema, me ha encantado, aunque no se pueden hacer ciertas decoraciones con ella, me ha gustado mucho por su sabor discreto y perfecto para acompañar a esta tarta y también porque es muy ligera y fácil de comer al no llevar mantequilla, todo un acierto para rellenos con menos calorías.